EL FRIJOL CON PUERCO, MUCHO MAS QUE UN DELICIOSO PLATILLO REGIONAL YUCATECO.

Desenvainando el frijol nuevo

Aunque es posible que existan cientos de guisos típicos de la tradicional y mundialmente apreciada cocina yucateca, es indiscutible que el "Frijol con Puerco" se disputa, junto con la "Cochinita" y el "Poc Chuc", uno de los primerísimos sitios en popularidad, tradición y sabrosura. Pero, ¿Que hace  a esta comida, reina y señora de los lunes al mediodía en las mesas de los hogares yucatecos, algo tan especial?

Podríamos asegurar que prácticamente en cada familia hay una variante singular de la receta, un toque especial, una técnica añadida desde hace mucho por la abuela y que se ha transmitido de generación en generación. ¿El éxito está en seguir al pie de la letra la receta? ¿Será posible plasmar en una hoja de papel, que contenga ingredientes y procedimiento de preparado y cocción, todo lo que hay alrededor de una tradición así de grande?

La experiencia transmitiéndose a la siguiente generación

La agitada vida moderna, ha conseguido que se tengan que pasar por alto ciertas acciones, que se agilicen algunos pasos, pero que el resultado siga siendo aceptable "para no perder la tradición", a fin de cuentas, cumple el objetivo de saciar el hambre y el antojo, pero ¿Es suficiente?

Indispensable ahumar la carne a la leña

Me parece que el Frijol con Puerco es más que eso, mucho, pero mucho más. Tal vez no lo encuentres en ninguna receta, ni se te hubiera ocurrido pensarlo de este modo, pero el ritual inicia desde la compra de los ingredientes, el lugar donde lo haces y a quien eliges como proveedor. Ir a un mercado de pueblo, de barrio o de colonia, hacer la fila para esperar tu turno, saludar a conocidos o vecinos, reír con el chiste que te cuenta el carnicero, o permitir que te actualice con las últimas noticias de la política local. Eso es convivencia, pluralidad, aceptación, entonces tu guiso empieza a oler a comunidad.

Los acompañamientos

El chiltomate

Luego seleccionas los mas turgentes y colorados tomates para el chiltomate, la limpia cebolla, un erguido racimo de cilantro, los vistosos rábanos de carmín encendido, ¿Por que no el frijol nuevo, aún en su vaina?, impídele de tajo que algún día llegue a llenar una industrializada bolsa y ocupe un frío y aburrido anaquel de supermercado. Cómprale a la mestiza que los ha cultivado con esmero en su patio trasero o en su parcela, que ha obtenido los mejores resultados, y viene a ofrecerte los frutos de su trabajo. Entonces tu cocina será un aula en donde se dicta cátedra de economía, finanzas y negocios, ah, pero eso sí, con un toque de algo que está muy de moda: ecología y sustentabilidad.

Permite que en la preparación participen otros miembros de la familia, que cada quien ayude en lo que pueda, platiquen de los inconvenientes en la escuela, los sueños y las metas que con tenacidad serán cumplidas, y entonces estarás echando a la olla una buena dosis de armonía familiar.

Listo para servirse

Entonces, cuando te sientes a la mesa, y esté servida con todo lo necesario, te darás cuenta que no estás a punto de satisfacer una necesidad física o un simple antojo, que el hambre o el régimen para bajar de peso han dejado de tener argumentos ante lo que ocurrirá de inmediato, pues dará inicio una celebración del alma, que compartirás con los seres humanos que más quieres sobre el planeta, y que disfrutarás con ellos los frutos selectos de la siempre generosa madre tierra. Será una fiesta llena de colorido y finalmente... serás feliz.

Claro que esto no ocurre únicamente con el Frijol con Puerco, puedes aplicar la receta a cualquier otro guiso, bien vale la pena.

Feliz lunes de Frijol con Puerco.

La familia disfrutando el almuerzo